El precio del poder
- Género: Drama/Drogas
- Año de estreno: 1983
- Título original: Scarface
- Director: Brian De Palma
- Guión: Oliver Stone
- Protagonistas: Al Pacino, Steven Bauer, Michelle Pfeiffer, Mary Elizabeth Mastrantonio
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Una de las películas más recordadas de la década de los 80 es El precio del poder (Scarface en su versión original). Y lo es en gran medida por la magistral interpretación realizada por Al Pacino de Tony Montana, un hampón de poca monta cuya ansia de poder le lleva a escalar hasta lo más alto de una organización criminal.
La trama de la película refleja lo despiadado que puede llegar a ser el negocio de la droga, y como una ambición desmedida puede llegar a convertirse en autodestructiva. La película está salpicada de escenas en las que la violencia y el consumo de drogas está presente, y muestra como, aunque en primera instancia el camino del dinero fácil parece atractivo, elegirlo como opción tiene consecuencias.
Sinopsis
En 1980 se produce un éxodo masivo de cubanos hacia las costas de Miami, y entre ellos se encuentra Tony Montana. Sus comienzos son duros, con un empleo mal pagado, pero su ambición y deseo de triunfo no tienen límite.
Decidido a labrarse un futuro próspero, comienza a trabajar de matón para un pequeño mafioso, pero no tarda en comprobar que tiene más agallas que cualquiera en la organización y pronto comienza a desafiar a su jefe. Montana comenzará a acumular poder y dinero, pero también enemigos, y terminará por pagar un alto precio.
El precio del poder – trailer oficial
Crítica
Tony Montana es la representación viva de la ambición. Expulsado de Cuba y enemigo acérrimo del comunismo, llega a los Estado Unidos con el deseo de hacer real el sueño americano, y aunque en un principio no tiene más remedio que aceptar un empleo como friegaplatos, pronto se enrola en una organización criminal como matón.
Partiendo de esa base, lo que la película muestra es a un hombre sin escrúpulos, capaz de hacer lo que sea para lograr su objetivo de llegar a lo más alto.
La película nos enseña la vida llena de lujos de lo grandes capos de la droga, pero también la cara menos amable, y es que quien elige esa vida está condenado a no poder confiar en nadie. De hecho, el argumento puede parecer que se basa en mostrar cómo es el ambiente en que se mueven los narcotraficantes, pero la historia subyacente no es otra que la que muestra una soledad cada vez mayor cuando se asciende a la cumbre.
Plagada de diálogos malsonantes, la película cuenta con todo un ramillete de personajes que rodean al protagonista y cuyas vidas se van viendo afectadas de una manera u otra según Tony va alcanzando sus objetivos. La autodestrucción de Manero salpica a quienes se encuentran a su lado, y poco a poco todos y cada uno de los que lo apreciaban comienzan a ver cómo cambia hasta convertirse en alguien verdaderamente odioso.
Sin que se la pueda calificar como de acción, es una película intensa donde la violencia está siempre latente y hace acto de presencia de manera inesperada. Pero sobre todo es un recital de interpretación de Al Pacino, que carga sobre sus hombros todo el peso de la película y es capaz de mantener la atención del espectador sin que decaiga un solo instante a lo largo de todo el metraje.
El Precio del Poder es sin duda una película extraordinaria, que marcó época, y que ha envejecido muy bien. Quienes no la hayan visto encontrarán que, a pesar de su estética ochentera y trasnochada, el fondo de la historia sigue teniendo vigencia, porque en todas las épocas y en todos los ámbitos han existido personas capaces de sacrificar cualquier cosa por alcanzar una mayor cuota de poder.
Curiosidades
- Al papel de Tony Montana optaron 3 actores: Bruce Willis, Tom Cruise y Al Pacino. El director Brian de Palma quedó impresionado por el trabajo de todos ellos en el casting, pero a pesar de la difícil elección, optó finalmente por Al Pacino, que en su opinión había sido el más destacado. El tiempo terminó por demostrar lo acertado de su criterio.
- A la comunidad cubana de Miami no le hizo mucha gracia quedar retratada como una comunidad plagada de narcos y mafiosos, así que no le dieron la acogida más cálida al equipo de filmación. Tanto es así que ante la actitud “poco amistosa” que les depararon, se optó por grabar algunas secuencias de la película en Los Ángeles.
- Cualquiera puede sentirse Tony Montana por unos días y disfrutar de su suntuosa mansión, ya que ésta se ofrece en alquiler. Basta con viajar a Santa Bárbara, California, y abonar los 30.000 dólares al mes que pide su propietario.
- Uno de los temas sobre los que más se especuló durante mucho tiempo fue qué producto era el que los protagonistas esnifaban durante la película. Finalmente se reveló que lo que supuestamente era coca se trataba de polvos de talco y que, como consecuencia de ello, Al Pacino tuvo que afrontar complicaciones respiratorias al finalizar el rodaje.
- La actriz Miriam Colón representaba el papel de madre de Tony Montana en la película, sin embargo, era sólo cuatro años mayor que Al Pacino.
Juego
La popularidad de la película ha sido tal incluso hay un juego sobre ella. Básicamente el objetivo no es muy distinto del que tenía Tony Montana, ya que se trata de obtener el control de la ciudad a base de ejercer la violencia y de conseguir el mayor dinero posible, lo que se realiza por medio de misiones. Estas pueden ir desde robar algún establecimiento hasta darle un escarmiento a cualquiera que se interponga en tu camino.
Como en la mayoría de los juegos resulta gratuito, pero avanzar más rápidamente exige la compra de determinados extras.
Camisetas
También existe merchandising de la película. De hecho, en España se comercializan camisetas temáticas sobre El precio del poder, en las que aparecen personajes, frases y momentos estelares de la película. Si eres un auténtico fan de este título, puedes encontrarlas aquí.
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Contenidos
Uff qué recuerdos Scarface, pero si yo era un enano cuando la echaron! jaja
Y aún recuerdo el revuelo que montó en la cultura del cine, no pasó desapercibida no… todo un clásico que tener en la estantería de un buen cinéfilo.